Compartir la experencia, es compartir el gusto y la responsabilidad. Es abrir los ojos através del otro, asumir el compromiso que nos toca como actores fundamentales de nuestro entorno, herederos del pasado y sembradores del futuro.

Éste es un espacio para compartirles mi experiencia.
Un espacio para compartir el mundo que me decidí a recorrer.



12 de mayo de 2011

Action Week

El siguiente es un articulo en español que nos pidieron como trabajo semanal.
Es un breve texto acerca de nuestra experiencia en el Action Week, semana en la cual
los DI´s (development instructors) trabajan en comunidades con organizaciones locales
insertandose por unos días en la vida y trabajo comunitario.





Action Week I : Rose Hall


El manejo de la frustración siempre será un asunto con el cual lidiar siempre que se tenga que emprender cualquier proyecto. El Action week no fue la excepción.

Atendiendo a la franqueza, la experiencia completa resultó diferente de lo que yo esperaba, distintos factores dieron como resultado una semana difícil con algunos ratos de incertidumbre. La prisa, la desorganización, los conflictos internos al tomar las decisiones y responder a expectativas y opiniones diferentes fueron una constante. Para alcanzar los resultados, fue necesario confiar en el criterio propio, tomar la responsabilidad y hacer que las cosas funcionen aún cuando las condiciones generales no ayuden mucho.


Action Week supone una semana en la cual, los equipos de DI´s trabajan durante una semana en distintos proyectos con organizaciones locales, nuestro trío trabajó con Selly Patterson. Nuestro proyecto consistió en rehabilitar un salón en el Comunity Center de Rose Hall, , una comunidad a quince minutos de RVA para convertirlo en un anexo a la biblioteca.


Las tareas principales fueron: limpiar dos cuartos llenos de escombro y basura, pintar el interior del cuarto a rehabilitar, instalar una puerta que divide el anexo con el nuevo cuarto de computadoras y construir, instalar y pintar unas mesas de trabajo.



La mañana del martes comenzamos el Action Week, salimos con prisa de RVA después de hacer unos cortes a unas piezas de madera para montar la puerta en el Comunity Center.
La imprevisible lluvia de San Vicente hizo que nuestra llegada fuera complicada, la camioneta estaba llena de herramientas y maletas, nadie nos estaba esperando.

Luego de un rato de organizar y poner a resguardo las cosas, buscamos a alguien que nos dijera dónde y con que comenzar a trabajar, no teníamos electricidad al preguntar al profesor de la escuela por un Switch o una extensión, obtuve como respuesta un “no hagan nada, Selly no sabe, el gobierno va a trabajar con ese cuarto, ustedes no tienen que hacer nada”, parece que hay algunos malentendidos entre algunos grupos dentro de la comunidad. Ante la incertidumbre no hubo más que hacer que buscar medios propios. Después de un rato, llegó una persona de la organización de Selly y nos mostró que era lo que había que instalar, en dónde estaba el material y las herramientas para el trabajo.



Comenzamos el martes a media tarde a instalar el marco para la puerta que dividirá el anexo de la biblioteca con el cuarto de computadoras. El primer problema en la instalación fue al intentar colocar la puerta en el espacio del marco, primero, nunca tuvimos las medidas exactas de los cortes de la madera para el marco, nadie nos las dio y nosotros no preguntamos, por otro lado, el marco en la pared no estaba recto y la puerta no encajaba, nuestra idea era desmontar el marco y rehacer los cortes en RVA a las medidas y con las especificaciones de la puerta y la construcción, pero el hombre insistió en que cortáramos la puerta para hacerla encajar en el marco, después de un rato de discusión, la decisión fue que finalmente, era su Organización, su proyecto y su comunity center, nosotros estábamos ahí para ayudarlos con lo que ellos necesitaran, lo más razonable en ese momento, me pareció escuchar sus ideas y atender a la manera como él quería hacerlo, aún cuando esto no fue lo que esperaban en RVA y causó otro conflicto, fue difícil manejar las dos opiniones y atender a las instrucciones de dos personas diferentes. Finalmente, creo que uno tiene que atender a su sentido común y hacer lo que resulte correcto en el momento y para las personas para quienes trabajamos, somos voluntarios, no somos dueños de la verdad absoluta ni estamos aquí para imponer nuestras ideas.



El trió se quedó en Rose Hall durante la semana, nos hospedamos con la mamá de Sally, en una casa subiendo una pequeña colina, uno de los puntos habitados de mayor altura en la isla, dos cuartos suficientes para hospedar al trio, la comida y cocina corrió por nuestra cuenta. Aún cuando los horarios de las tiendas eran muy irregulares, el trío se administró para conseguir comida y reponer algunas de las cosas que se gastaron durante nuestra semana. Toda una experiencia el ver el día a día de las comunidades, aquí es tan distinto al lugar a donde yo vengo, sin embargo, encuentro tantas similitudes.


La puerta quedó instalada, Arlene y Paola se encargaron de la pintura del cuarto y la pintura de la puerta y todas las mesas. El jueves comenzamos con la instalación de las mesas en el cuarto, cuatro dispuestas una al lado de la otra a manera de escritorio largo. La falta de material y herramientas nos hizo improvisar y aprovechar el material hasta el último centímetro.

Las condiciones del tiempo y del espacio para trabajar nos dejaron algunos espacios de tiempo libre, aún cuando llamamos a Kellan, el Peacecorp en Rosehall para ofrecer ayuda , no hubo mucho que hacer, intentamos también con los profesores de la escuela, pero el hecho de estar sólo unos días en la comunidad y no tener el tiempo para organizar no nos dejó hacer mucho, las clases y los tiempos ya estaban organizados para ellos y todos tenían pocas actividades, así que los ratos de ocio y espera los dedicamos a hablar y jugar con los niños de la escuela entre sus descansos.



El viernes por la mañana terminamos de instalar las mesas, el material dio suficiente para instalar las mesas de tal modo que cubrieron dos paredes completas. El trabajo estaba casi terminado, después de un par de problemas resueltos y algo de frustración, las actividades que habían sido requeridas quedaron cubiertas, la puerta instalada y pintada, las mesas en su lugar. El equipo respondió bien. No diré que fue la mejor de las semanas, la verdad es que me quedé con el sentimiento de haber podido hacer algo mejor, pero lo realmente rescatable de la semana, fue que pudimos lograr los resultados sólo con las cosas que tuvimos a la mano, las herramientas, el material, la desorganización y las opiniones encontradas nos empujaron a tomar decisiones y a no quedarnos a la expectativa, adueñarse de la situación y hacer que las cosas funcionen aún cuando las condiciones no están a favor fue el mayor aprendizaje de la semana. El trío como equipo de trabajo funcionó muy bien y logró los resultados que se pidieron, al final, una semana dura pero de un buen aprendizaje.

H. Gerardo Ibarra


No hay comentarios:

Publicar un comentario